La importancia de las estampas en la vida y la obra de Ceán Bermúdez queda patente en los manuscritos que sobre este tema conserva la Biblioteca Nacional de España. Él mismo cuenta (Mss/21458/1, f. 33v) que fueron sus fieles compañeras a lo largo de su vida y que gracias a ellas pudo sobrellevar los tristes acontecimientos de un periodo muy conflictivo de la historia de España. Ceán era un verdadero «aficionado», un apasionado de las estampas a las que consideraba, por una parte, valiosas obras de arte en sí mismas, cuya contemplación le proporcionaba un gran placer estético y, sobre todo, un instrumento fundamental para la comprensión y el estudio de la historia de la pintura, la escultura y la arquitectura, pues por entonces eran el único medio de conocer las obras de los grandes maestros a las que, de otro modo, no hubiera tenido acceso.
A lo largo de cincuenta años, Ceán reunió una colección de estampas que, aun sin ser muy numerosa en comparación con otras de España y el extranjero, sí es muy interesante pues, por una parte, en ella figuran obras de los mejores grabadores de reproducción que supieron «traducir» con un lenguaje propio las composiciones que habían ideado los grandes artistas europeos desde el Renacimiento hasta el siglo xix y, por otra, estampas grabadas por grandes pintores como Durero, Ribera, Parmigianino, Rembrandt, Van Dyck o Goya. Tomando como base su colección (Mss/21457) y la bibliografía que sobre el tema tenía en su biblioteca y en otras a las que tuvo acceso (Mss/22729/173), pudo escribir al final de su vida la primera historia del grabado europeo en español (Mss/21458/1, ff. 31 – 72) y la primera Historia del Arte de la Pintura en español (manuscritos en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando).
En este portal se pueden ver digitalizados no sólo las estampas que había reunido Ceán en 1791, sino todos sus escritos sobre el grabado que conserva la Biblioteca Nacional de España.